odría
liberar fácilmente a nuestro México secuestrado, convertido en un Narco
Estado; lo difícil seria organizarse. Bastaría con el apoyo de la prensa
y medios de comunicación honestos en contra de la corrupción para
difundir y promover esta iniciativa para hacerla una realidad.
Dicha policía seria integrada por ciudadanos radicados en su
jurisdicción y nombrados por un consejo de vecinos del lugar, y su
salario podría pagarse de manera tripartita, una parte solventarían los
vecinos, una segunda parte el gobierno y la tercera seria de los
comerciantes y empresarios en busca de facilitarle al gobierno la nueva
comisión, pero también quitarle facultades sobre la policía
independiente que trabajaría con exclusivas claves y red independiente
de radio comunicación y una obligatoria coordinación con seguridad
pública y la milicia.
Es un hecho que van a protestar y
rechazar esta iniciativa millones de ciudadanos que padecen en México la
pobreza extrema. Pero al volver la seguridad a las calles, al hogar y a
nuestro trabajo nuestra economía se reactivaría.
De esta
manera se irían extinguiendo de manera eficaz, el tráfico de drogas, el
robo, secuestro y demás delitos de la industria del crimen y
delincuencia organizada. Como la extorción, tráfico de armas etc. pero
también se reactivaría la economía pues “la maña” con sus extorciones
inhibe las inversiones, comercialización y productividad de las fuentes
económicas del país, haciendo mención especial de la falta de
explotación de las minas por connacionales, a conveniencia y regocijo de
los extranjeros que nos están despojando diariamente de toneladas de
oro, plata, cobre, fierro etc. etc. llevándose nuestras riquezas a
cambio de ridículos espejitos.
Además de que por naturaleza
ambas policías competirían en demostrar su trabajo para ir despidiendo a
quienes no ofrezcan resultados favorables a la seguridad nacional.
Muchos se refieren al crimen y delincuencia organizada como el “segundo
gobierno”, tal vez algún día lo fue, pero hoy en la práctica resulta
que viene siendo el “primer gobierno” y no se sabe bien a bien, desde
cuando se infiltró en la administración gubernamental, pero cada día las
evidencias van saliendo a la luz pública, solo para confirmar lo que se
sospechaba y la gran mayoría de negaba a creer, a pesar de ver muchos
indicios, pero la realidad supera la imaginación, ahora nos damos cuenta
que varias iniciativas, propuestas y acciones del Presidente de la
Republica, gobernadores, presidentes municipales, leyes reformadas “bajo
cortinas de humo” y por consigna en las legislaturas locales y
federales, por eso no es gratuito el mal funcionamiento del resto de
instituciones y dependencias de gobierno, y la mayoría de medios de
comunicación pues están infestados de corrupción porque precisamente
responden a las ordenes del “primer gobierno” es la firma de su trabajo,
es el sello de su garantía, es el ”viejo sistema”
La “guerra
contra el narco” del gobierno federal es falsa, en realidad es una
“guerra entre narcos” beligerancia que por naturaleza va dejando al
descubierto la infiltración, complicidad y nexos que habría del crimen y
delincuencia organizada en la presidencia de la republica, el ejército,
la marina, todas las corporaciones policiacas, Televisa, jueces,
magistrados, influencia en censura y autocensura de la mayoría de los
medios de comunicación, bancos, casas de cambio y de empeño, algunos
empresarios, legislaturas locales y federales, IFE, equipos deportivos,
bandas y grupos musicales, artistas y hasta con los clérigos que han
recibido narco limosnas. Salvo honrosas excepciones delinean todo un
Narco Estado.
Se estima que los asesinados en esta guerra entre
narcos supera las 250 mil personas entre delincuentes e inocentes,
civiles y efectivos de todas las corporaciones de seguridad, a pesar de
que cifras oficiales reconocen poco más de 70 mil muertos.
Muchas voces han propuesto que se legalicen las drogas para acabar con
la violencia desatada y el pleito entre los diversos carteles de la
droga, argumentando que así como legalizaron el consumo del alcohol, se
acabaron los traficantes y las guerras entre ellos, pero estas opiniones
carecen de sentido común e inteligencia, al pasar desapercibidas tantas
desgracias que ocasiona el influjo del alcohol, pues legalizaron su
comercialización y consumo, pero nunca se ha reflejado el beneficio en
la seguridad pública y su economía, sino todo lo contrario y encima se
procura su monopolio. Así mismo sucedería con la legalización del
consumo de drogas, solo que estas embrutecen mucho más que el alcohol.
También nuestro presidente ilegitimo Felipe Calderón Hinojosa ha tenido
la consigna de intereses oscuros de establecer “la policía única”
argumentando una estrategia en contra del narcotráfico, cuando en
realidad su resultado sería lo contrario; si dicha policía se llegara
aprobar tendríamos resultados fatales en corto tiempo, pues los
antecedentes debidamente registrados y documentados han demostrado que
sobornar, influir, y/o coaccionar a un solo jefe de seguridad nacional,
es mucho más fácil sobornar a uno que a varios, además de que esta
intención lleva fines de monopolización del comercio de drogas y
estaríamos entrando en la condición y estrategia del nuevo orden
mundial.
Aquí está la iniciativa y la convocatoria, de ustedes y mi esfuerzo dependerá hacerla realidad.
¡Estemos unidos mexicanos!
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